El candidato opositor Edmundo González Urrutia ha dicho este miércoles que no acudirá a la citación del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, controlado por el chavismo. “Insto a las autoridades a recuperar la sensatez y buscar en diálogo franco causes que canalicen los planteamientos de cada parte”, ha pedido, y que se haga en “un marco aceptable para todos”. González Urrutia envió un mensaje el lunes, junto a María Corina Machado, para apelar “a la conciencia de militares y policías”, y pedir a las Fuerzas Armadas que no reprimieran las protestas. La tensión en la región se eleva con la crisis poselectoral. Gabriel Boric, presidente de Chile, acusó al régimen de intentar “cometer un fraude” y el canciller Yvan Gil le acusa de “pinochetista y golpista”. El asesor especial de Lula da Silva, Celso Amorim, ha dicho que teme una guerra civil en Venezuela.
Se cumplen 10 días de las elecciones presidenciales en las que el diplomático Edmundo González Urrutia se enfrentó al heredero de Hugo Chávez, al que las autoridades electorales concedieron la victoria sin pruebas de los resultados. Siete países europeos, España incluida, se han sumado a Estados Unidos, Noruega, Brasil, Colombia, México y el resto de países que reclaman al chavismo que saque a la luz pública las actas oficiales de todas las mesas. El viernes, la oposición difundió una base de datos con el conteo completo de 24.532 mesas.